Las limpiadoras y tónicos son la base de todo cuidado facial. Si no empezamos por una buena higiene facial, la salud de nuestra piel se puede ver afectada y los resultados de nuestros tratamientos no serán lo esperado. La piel es el órgano que mayor exposición tiene con el exterior y sirve de barrera frente a los agentes externos. La contaminación, el polvo o el maquillaje se va acumulando a lo largo del día. Por la noche, la piel es cuando más activa está, es cuando se produce la reparación de la piel y del ADN, cuando se produce la mayor cantidad de colágeno y la piel se depura y los productos de deshecho del metabolismo se van acumulando, por lo que resulta importante hacer una limpieza exhaustiva de ésta tanto por la mañana como por la noche.
Cuando la piel es grasa esta necesidad se hace más imperiosa, para evitar la acumulación de ésta o prevenir infecciones de granos o comedones (puntos negros).
Podemos encontrar distintos tipos de productos para la limpieza, según nuestro tipo de piel o texturas con las que nos sintamos más cómodos:
*Leches con textura cremosa; se retiran con algodón. Indicadas para pieles secas que deben evitar el contacto con el agua lo máximo posible para evitar su deshidratación debido a la acción del cloro.
*Mousse con textura de espuma; se retiran con agua. Son más indicadas para pieles mixtas/grasas aunque también las hay para otro tipo de pieles para personas no se sienten bien limpias si no se retiran el producto con agua.
*Geles; textura gelatinosa. Indicado para pieles mixtas/grasas. Se retiran con agua.
*Agua micelar; textura líquida. Producto con “micelas”, partículas que atrapan la suciedad. Indicadas para todo tipos de pieles. Se retira con algodón.
Tónicos Faciales Naturales – Tónicos Faciales con productos Naturales
El tónico es el producto de finalizado de una buena higiene facial. Con el tónico retiramos los restos de maquillaje o de impurezas que nos hayan podido quedar en la limpieza. De esta forma, será mucho más completa y profunda. Además nos ayuda a equilibrar el ph de nuestra piel que se puede ver alterado con la limpieza quedando ligeramente alcalina (ph superior al 5,5). Es importante que nuestra piel tenga un ph ligeramente ácido para que ser menos propensa a ser atacada por virus o bacterias. Además nos aportará un toque final de frescura a la piel. Es importante que el tónico no contenga alcohol para que no la reseque y respete el manto hidrolipídico de ésta.
Para aplicarlo lo haremos ayudándonos de un algodón para retirar bien los restos de impurezas. Finalmente podemos fijarlo con los dedos dando golpecitos a modo de tecleteo. También lo podemos usar en verano para refrescar e hidratar la piel pulverizándolo sobre el rostro. Resulta de una gran ayuda cuando tomamos el sol para rehidratar la piel siempre que no contenga ningún ingrediente fotosensible.