El momento del  baño es uno de los más gratificantes del día. Hay personas que prefieren dárselo por la mañana para despejarse y otras que prefieren por la noche para irse a la cama más relajado y limpito.

Como es un acto que realizamos todos los días tenemos que tener un especial cuidado en escoger un gel de baño que nos deje sensación de limpieza pero que no agreda nuestra piel ni la reseque.

Por eso es importante usar geles suaves sin ingredientes agresivos ni tóxicos para evitar dermatitis, reacciones alérgicas o irritaciones.

Además cuidarás del medioambiente.

Es importante evitar utilizar un gel de ducha con ingredientes como los parabenos, conservantes utilizados como fungicidas y bactericidas que se han ganado una mala prensa por ser considerados tóxicos y estar relacionados, según estudios científicos, con trastornos hormonales y algunos tipos de cáncer. Los sulfatos agresivos son también otro ingrediente a evitar ya que arrastran la grasa protectora de la piel dejándola indefensa frente a las agresiones causando deshidratación y sequedad. Algunos, son limpiadores muy buenos, pero a la vez muy agresivos y  sobre todo son muy peligrosos para bebes, niños y pieles sensibles.

Las siliconas y los derivados del petróleo crean una capa encima de la piel como si fuera un plástico que no permite la transpiración impidiendo la salida de toxinas por eso deberíamos evitarlos también.

Los geles de baño de cosmética natural nos aportan nutrientes saludables para nuestra piel mientras la limpian suavemente y no aportan ingredientes perjudiciales para su salud. Además sus aromas provienen de ingredientes naturales y no de perfumes sintéticos.